LA EDUCACIÓN DEBE CONTINUAR
Tierrita de la esperanza
En momentos en que la economía es fuertemente golpeada por la descolgada de precios del petróleo y la parálisis financiera que provoca la pandemia del covid-19, la posibilidad de una recesión económica está a la vuelta de la esquina.
Las políticas gubernamentales podrán evitar, en cierto modo, que el barco se hunda, como los 11 mil millones de dólares de crédito que Colombia solicito al Fondo Monetario Internacional para enfrentar la pandemia y las estrategias desarrolladas en el aislamiento obligatorio, que van por buen camino.
Sin embargo, a futuro se sabe que un capital humano bien preparado es vital para garantizar un sistema socioeconómico próspero y competitivo. De hecho, las universidades desempeñan un papel significativo en la economía de los países, debido a que además de aportar conocimientos en proyectos de investigación, innovación y desarrollo tecnológico, transfieren conocimiento al tejido social productivo.
Por ello, vimos que en esta crisis sanitaria las instituciones de educación superior reaccionaron rápidamente, al pasar sus programas presenciales a virtuales en tiempo record, para los más de 2.200.000* estudiantes matriculados a nivel nacional, para evitar así que dejaran de recibir la transferencia de conocimiento.
Se espera que en este año se gradúen más de 450 mil personas que –seguramente– harán parte de la fuerza laboral de más de 1.620.000* empresas existentes en el país, las cuales necesitarán de las capacidades de cada uno de ellos para salir a flote de esta crisis económica y mantenerse a futuro.
Lo fundamental en este momento es no detenerse a ver como se desmorona el entorno. Se necesita actuar y la mejor manera es realizar una inversión en educación profesional, técnica o tecnológica que seguramente le garantizará, en los próximos años, tener un nivel de vida óptimo, puesto que los empresarios les interesan perfiles de empleados que tengan mayor preparación o que se encuentren capacitando.
De hecho es lo que muestra las estadísticas del Observatorio Laboral para la Educación donde el 70% de las personas graduadas consiguen trabajo y un 19% se convierten en emprendedores, lo que los hace piezas importantes del engranaje de la economía colombiana.
Por otro lado, hay que resaltar que el gobierno ha comenzado a activar acciones para fortalecer el sector educativo y para que la educación no se detenga. Dando a conocer, en un comienzo, un plan de auxilios del Icetex y de alivio para los estudiantes.
“Lanzamos hace una semana el plan de auxilios para muchos jóvenes, sobre todo a sus familias, afectados por la pandemia y con vulnerabilidad económica. Son más de 20.000 beneficiados. Donde se incluye también la suspensión temporal del pago de las cuotas, reducción de la tasa de interés mensual y, adicionalmente, los usuarios pueden disminuir el valor de la cuota mensual ampliando los plazos de las cuotas” dijo María Victoria Angulo, Ministra de Educación.
Con las medidas adoptadas por las universidades y las que el gobierno ha comenzado activar es seguro que la educación no parará y por lo tanto la economía saldrá a flote.
*Cifras del Ministerio de Educación y Confecamaras.